General
2024

25/01/2024

¿Sabías que a los bigotes de los perros también se les llama vibrisas? Te contamos sus peculiaridades, dónde aparecen y cuál es su función, y te damos la clave para cuidarlos. ¡Hay datos sobre los bigotes que te sorprenderán!

Los perros y los humanos, como mamíferos que somos, tenemos todo el cuerpo cubierto de pelo. Evidentemente, las diferencias son importantes. Excepto las personas con calvicie, lo normal es tener más pelo en la cabeza que en brazos y piernas, por ejemplo. Por el contrario, los perros tienen el pelo distribuido en todo el cuerpo por igual. Otra cosa es la longitud, que puede variar de unas zonas a otras según su raza. Sin duda alguna, ya te habrás dado cuenta de que tu perro tiene unos pelos más gruesos y más largos que destacan en su cara: los bigotes. ¿Sabías que también se llaman vibrisas? ¿Y que otros mamíferos como focas, ratones, elefantes y delfines también tienen bigotes? Nuestros ancestros humanos eran bigotudos, pero perdieron estos pelos hace miles de años. Lo que sí conservamos son algunos de los músculos que nos permitían moverlos.

Sigue leyendo para descubrir cinco datos muy curiosos sobre esta parte del cuerpo de tu querido compañero de cuatro patas y un consejo para cuidarlo bien.

1. Las peculiaridades de los bigotes: no son un pelo cualquiera. 

Su localización varía según la raza. Si lo observas bien de cerca, verás que tu perro no sólo tiene bigotes encima del labio superior, sino también pueden aparecer encima de los ojos, en el mentón, las mejillas y, en algunos casos incluso en la parte posterior de sus patas delanteras. Todos los perros tienen bigotes independientemente de su edad y sexo. De hecho, los cachorros nacen con los bigotes incorporados y estos son los primeros pelos en desarrollarse sin tener que esperar a la adolescencia. Son más ásperos y gruesos de lo normal, como unas varillas que, al igual que su pelaje, están hechas de queratina. Se van afinando hacia el extremo hasta terminar en punta, parte por donde son más flexibles. Los únicos mamíferos cuyos bigotes no acaban de forma afilada sino cilíndrica son los elefantes. Tienen raíces tres veces más profundas y son más sensibles que los pelos normales, porque los folículos donde se originan los bigotes están rodeados de vasos sanguíneos y terminaciones nerviosas que transmiten información al cerebro de tu perro. 

Oceanpetfood_240125_BLOG_2.jpg

2. Son una herramienta sensorial para explorar el mundo equivalente a nuestras yemas dactilares

Que sean tan sensibles hace que los bigotes de un perro puedan equipararse a las yemas de los dedos de los humanos. En otras palabras, el perro toca lo que le rodea a través de sus bigotes, que se doblan cuando entran en contacto con una superficie. Esa flexión termina convirtiéndose en una señal que viaja hasta el cerebro, según un estudio publicado en la revista Mammal Review. Por tanto, la función principal de los bigotes es actuar como una herramienta sensorial, ayudando a los perros a explorar su entorno, identificar objetos y detectar posibles peligros incluso en ambientes donde hay poca luz. Si tu perro toca un objeto o una superficie con sus bigotes, las terminaciones nerviosas envían información al cerebro sobre su textura, tamaño y forma.

3. Los bigotes de los perros funcionan como un radar.

Les ayudan a moverse y orientarse, sobre todo en entornos con baja visibilidad. Al aire libre, en la naturaleza, los bigotes pueden alertar a un perro sobre la presencia de una presa, enemigos potenciales o, en el caso de los lobos, la ubicación de su manada. En casa, los bigotes apoyan el sentido olfativo de los perros para ayudarlo a localizar comida o sus juguetes favoritos durante la noche sin chocarse con las paredes. Es decir, funcionan a modo de radar.

)ceanpetfood_240125_BLOG_3.jpg

4. Si quieres descubrir cómo se siente tu perro presta atención a sus bigotes.

Tu perro también puede utilizar sus bigotes para comunicar sus emociones. Probablemente en más de una ocasión te ha puesto ojitos. ¡Es imposible no sonreír al verlo! Es capaz de arquear los músculos que tiene por encima de los ojos y mover así esos bigotes. Se trata de un movimiento aprendido tras siglos de convivencia e interacción con los humanos, según el Dog Cognition Centre de la Universidad de Portsmouth, en Reino Unido. Sabrás si tu perro está feliz o tiene curiosidad porque levantará esos bigotes y te cautivará. Por otro lado, cuando un perro se siente amenazado o asustado, suele ensanchar los bigotes de su hocico y dirigirlos hacia el origen de la amenaza.

5. Los bigotes también cumplen la función de proteger a tu perro.

Cuando algo pequeño, como por ejemplo una mota de polvo, cae sobre un bigote situado encima del ojo, tu perro es capaz de percibirlo. Entonces, se la quitará parpadeando o moviendo la cabeza. Esta reacción protege sus ojos ante cualquier cuerpo extraño, igual que hacen las cejas y las pestañas en una persona. Por otra parte, los bigotes del hocico y las mejillas también tienen una función protectora. Mientras paseáis por la naturaleza es normal encontrar hierbas más altas de lo esperado o alguna planta con espinas. En esos casos, los bigotes del hocico la detectarán enseguida, tu perro interpretará la señal y reaccionará retrocediendo o cambiando su trayectoria para evitar rasparse un ojo. Por supuesto, todo esto ocurre en milésimas de segundo. 

Un consejo: no le cortes los bigotes, ni si quiera se los toques.

¿Te ha pasado por la cabeza la idea de que tu perro tiene un bigote suelto que está fuera de lugar y le afea la cara? ¿Te has planteado cortárselo? ¿’Arreglárselo’ como hacen los hombres con su bigote y su barba? Mejor no lo hagas. Sin sus bigotes, tu perro se sentiría perdido y desorientado. Además se sentiría molesto y le dolería. No obstante, muchos perros mudan los bigotes de forma natural de la misma manera que mudan su pelo. No te preocupes, nuevos bigotes vuelven a crecer tras varias semanas o meses. 

Mammal Review